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martes, 13 de mayo de 2014

Rudy no eligió a Tiempo Argentino; pagó 175 mil pesos para salir en Clarín

El actual secretario general de la Cámara de Diputados de Santa Cruz Pablo Noguera junto a Rudy Ulloa Igor - Foto: OPI Santa Cruz/Francisco Muñoz
13/05 – 14:15 – ¿Paradoja o reconocimiento explícito del fracaso de los medios oficialistas?. La actitud que tuvo el domingo Rudy Ulloa Igor, de pagar 175 mil pesos para que el diario Clarín publique una solicitada suya en página 57, tal como lo reveló hoy Fm News, es todo un reconocimiento expreso de que el tan criticado y vapuleado medio capitalino, es quien más se lee en el país; varias veces más que los cientos de medios oficialistas y para oficialistas, que no los mira, escucha, ni lee “ni el loro”, como se dice en el barrio.
Es decir, si un hombre que vive de los medios públicos, acude a multiplicar su palabra por medio del diario más insultado desde el gobierno y combatido por el kirchnerismo, algo está fallando: o nos están mintiendo permanentemente, cuando hablan de esta guerra “contra el monopolio” o les ha fallado de manera fenomenal la estrategia de comprar medios y crear espacios de opinión, bajo la teoría de que “a mayor cantidad de medios, se puede captar mayor cantidad de audiencia”, un error conceptual de la comunicación de masas y un extraordinario yerro político, al cual nos tiene acostumbrado el kirchnerismo, tan básico en delinear estrategias para captar voluntades y unificar el mensaje bajo la tutela del relato.
Ulloa putea por izquierda y recurre “a la Corpo” para difundir su mensaje. Cobra del Estado nacional millones de pesos en pauta oficial, que el gobierno le niega a diarios, revistas y canales no alineados con el kirchnerismo, pero a la hora de pagarle a alguien para que instale su mensaje, le toca timbre a Magnetto.
Desde su desaparecido periódico, siempre alineado con el discurso facilista y aplaudidor de cualquier mohín que haga la presidenta, no ahorró munición gruesa contra “el diario amarillista”, el “periódico golpista”, el “panfleto de la dictaduras”, “el monopolio concentrador del poder de los `90” y/o “el pasquín de la oposición”, refiriéndose al diario de mayor tirada nacional, al que finalmente fue a buscar para hacerse escuchar.
A diferencia del Frankestein del periodismo local que creó Rudy, tomando empleados públicos pagados por el Estado y capital prestado, solventado por la pauta oficial, los medios que no viven del kirchnerismo ni de otros partidos políticos, pueden sobrevivir a los gobiernos; en cambio, el destino de El periódico, como el de Prensa Libre, en Santa Cruz, estaba pre anunciado desde hace mucho tiempo. Durarían lo que durara el dinero público saliendo a chorros de las arcas estatales. Esto pasa con más de 300 medios en el país, entre ellos los de Cristóbal López.
Clarín miente, pero lo necesitamos para que alguien nos lea”, sería ésta más o menos la paráfrasis de la solicitada de Ulloa, que parte de una incoherencia absurda, propio de los cultores ideológico de su partido que hablan de la desigualdad y la pobreza fomentada por “los poderosos” y viven en Puerto Madero, llenos de plata o fustigan a cualquiera que se les cruce, tildándolo de intolerante y no admiten que alguien los critique. Este doble estándar, es el que mueve a Rudy Ulloa a acudir a “La Corpo” para hacer escuchar su queja y pretender que todos lo vean como el luchador militante que vino de abajo con esfuerzo y sacrificio, pero quien a través de sus medios funciona como ariete de campaña permanente, sin darle el mínimo espacio a quien lo requiera siendo crítico u opositor, aún pagando un caché tan alto como el que él le abonó a Clarín para que publique su solicitada. (Agencia OPI Santa Cruz)

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