– El candidato a intendente de Pico
Truncado, Gianfranco Casarín, quien se mostró en una selfie,
fotografiado con alrededor 300 mil pesos en una mesa, llamó a los
periodistas en su ciudad y tras pasar el aviso de que es candidato a
intendente, se mostró interesado en responderle a PPT por la mención de
su caso que hizo Jorge Lanata y lo descalificó, negando que la
fotografía, haya sido real.(Por Rubén Lasagno)
Luego que se difundieran las fotografías que lo muestran junto a más
de 30 fajos de billete de 100 pesos, Gianfranco Casarín hizo una rueda
de prensa en Pico Truncado con el propósito de “desmentir” lo ocurrido
con la fotografía que él mismo se tomó junto a una mesa repleta de
dinero.
Sin embargo, esperó 72 horas para salir a desmentir la información, lo cual demuestra claramente que se trata de una maniobra para hacer conocer su candidatura a intendente que anunció en el mismo momento.
Casarín se autoelogió, nombró a quienes lo acompañan en la lista,
hizo plena referencia a su campaña y se refirió al tema de la foto,
culpando al periodista Jorge Lanata de “haber operado” en su contra,
aparentemente en complicidad con Eduardo Costa (¿?).
El truncadense lo calificó de “pelotudo” a Lanata y lo desafió a
enviar un equipo de producción “para que lo investigue y haga un informe
completo”. Es evidente que Casarín no entiende cómo funciona esto: a
Lanata, ni a la producción ni a nadie, le importa quien es Casarín ni
como vive, ni a qué se postula. El hecho pasó, ocurrió y lo informaron
públicamente. A nadie se le ocurre que a un medio nacional le interese
ser plataforma de lanzamiento de un candidato a intendente de Pico
Truncado.
Lo importante, en todo este asunto, no es cómo vive Casarín,
sino es de quién era el dinero que aparece en la foto y cuál era su
objetivo. Como informamos en OPI, ese dinero era de campaña y coincide
con las PASO, oportunidad en la que Casarín se encargó de hacerle la
campaña a Máximo Kirchner.
Todo lo demás no importa. A nadie le interesa cuánto tiene y cuánto paga, porque él no es lo importante. Lo realmente importante es que allí se muestra una
porcinúscula de la corrupción que rodean las campañas, el dinero negro,
el pago de voluntades y los enormes gastos que se enjuagan con dinero
público.
Es absolutamente aleatorio y secundario que Gianfranco Casarín haya hecho uso o no de ese dinero para cuestiones personales, porque no es funcionario ni nada que se le parezca,
ni podría probarse y porque a nadie le importa eso, por lo tanto, si
hubiera algo ilegal en su patrimonio no es de interés público, sería –
en todo caso – para ser tratado en otro ámbito de la justicia.
El locutor de Truncado, se equivoca plenamente cuando niega la foto. La imagen es absolutamente fiel y original. No hay ningún tipo de retoque ni edición y esto sí lo tendría que explicar Casarín,
pero no puede, entonces, sale a hacer la acusación de manual (es una
“operación”) y a decir que la foto es falsa. Nada de eso puede explicar
razonablemente. Pero lo más significativo, es que Casarín pretende que
un medio nacional hable de él y su candidatura, cosa que, por otra
parte, no va a suceder porque el caso terminó el mismo domingo. (Agencia
OPI Santa Cruz)
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