Aunque velada, la denuncia efectuada por sectores académicos respecto del supuesto sistema de vigilancia que tendrían incorporadas las netbooks del Gobierno generó repercusión en el ámbito político y escolar. El tema fue presentado en exclusiva por NOVA el pasado miércoles, y las mismas fuentes que apuntan a la Casa Rosada revelaron ahora la metodología de los alumnos para burlar el misterioso control de las máquinas.
La acusación que recae sobre Cristina Fernández es que el Gobierno estaría utilizando las netbooks a modo de “caballo de Troya”, para ingresar a territorio desconocido y conocer los modos y costumbres de cada familia. Es que un grupo de profesores de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) descubrió que, en su interior, esas computadoras tienen un software que envía la información “con rumbo desconocido”, según apuntaron.
Los educadores llegaron a este descubrimiento luego de un proceso de desarme de las computadoras, alertados por el hallazgo de sus alumnos en las aulas. Por caso, un profesor de la ciudad de La Plata le dijo a NOVA que las netbooks “tienen cámaras que están permanentemente fotografiando y filmando. Todo lo que se escribe allí, lo deja archivado y lo envía a un software”.
Pero los chicos, alertados de esa vigilancia, pusieron cintas, curitas o parches en los visores de las computadoras portátiles, según consignó el profesor, que prefiere el anonimato. “Esto no salió en ningún lado”, denuncia.
El grupo de profesores sostiene que cada máquina del programa Conectar Igualdad “viene programada de fábrica y no se puede alterar”, porque “tampoco puede cambiarse el disco rígido”.
Uno de los maestros contó que, al año pasado, un alumno “logró detectar dónde estaban alojados los archivos temporarios que va almacenando la máquina, y logró borrarlos. Pero es una carpeta oculta dentro del sistema”. “Todo lo que la máquina fue capturando, cuando el usuario se conecta, envía el material”, apuntan.
El plan nacional Conectar Igualdad comprende la entrega de tres millones de computadoras portátiles, durante un período de tres años, para todos los estudiantes y docentes de los colegios secundarios del país. Fue presentado hace poco más de dos años, y este jueves la Presidenta hizo entrega de la netbook número 2 millones en la inauguración de la segunda edición de la muestra Tecnópolis.
Desde La Plata, los profesores cuestionan que “si la máquina es personal, se supone que eso no debe pasar. Es un control que está más allá de lo lógico”. Además, objetan que, cada vez que los chicos abren su computadora, “deben comerse un minuto de propaganda política”.
De todos modos, algunos se permiten hacer concesiones. “Quizás sea para controlar si los chicos están estudiando”, analizan, al tiempo que se muestran sorprendidos de que “nadie haya dicho nada sobre el tema”. Hasta ahora.
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